Una productiva estadía académica de 5 meses realizó en la UMCE el académico e investigador Jesús Tejada, del Instituto de Creatividad e Innovación Educativa de la Universidad de Valencia, especialista en tecnología musical para la producción, interpretación y enseñanza de la música.
El vínculo del profesor Tejada con la UMCE se inició el año 2007, cuando el académico español realizaba investigación relacionada con el diseño, la implementación y evaluación de software para la enseñanza de la música: “trabajé con universidades que permitieran realizar un piloto de una investigación I+D+I del Ministerio de Educación de España. Así conocí a Tomás Thayer, del Departamento de Música de la UMCE, y a otros profesores de las Universidades de Chile y La Serena, con quienes el año 2008 iniciamos trabajo de campo con niños y niñas”.
PICALAB
A partir de entonces establecieron una red sólida que llevó a la suscripción de un convenio de colaboración entre la UMCE y la Universidad de Valencia, y el año 2010, a la elaboración del proyecto conjunto para la creación de un laboratorio virtual que se orienta a la creación de programas para el aprendizaje de las ciencias y las artes (PICALAB), de cuyo trabajo acaban de ser publicados dos artículos: en la revista Revista Estudios Pedagógicos UACH Vol. 44 Núm. 1 (2018) “Recursos informáticos para el aprendizaje de las matemáticas mediante metáforas musicales: el proceso de creación y evaluación de PicaLab” y en IJISME, International Journal of Innovation in Mathematical Education, de Australia, que aparecerá próximamente con el artículo "Design, Implementation and Students’ Emotional Assessment of a Software for the Learning of Rational Numbers through Music Metaphors in Chilean Primary Education. The case of AudioFractions."
EDUCAMUS
Los proyectos colaborativos además han dado origen a otras iniciativas, como EDUCAMUS, una plataforma digital financiada por CONICYT a través de su Programa de Atracción de Capital Humano Avanzado, encabezada por la Universidad de La Serena, y en la que participan además la UMCE y la Universidad de Chile. Uno de los componentes del proyecto permitió la pasantía del profesor Tejada en esta ocasión, explicó Tomás Thayer.
Lo que se intenta hacer a través de este proyecto, explicó Jesús Tejada, es una plataforma de formación de profesores de básica y de educadores de párvulos: “las universidades chilenas no proporcionan suficiente preparación musical. Hay estudios que concluyen que no entregan suficiente formación en las materias artísticas. Además, se producen contradicciones con las propias políticas del Ministerio, con un curriculum de Música que señala que el profesor de básica será quien imparta las clases de Música en primer y segundo ciclo, pero el profesor de Básica no ha sido preparado en sus carreras. Ni siquiera existe un estándar orientador de egreso en la carrera. Si a eso le sumas que en la prueba SIMCE no evalúa materias artísticas y que el profesorado de formación inicial tampoco es valorado en estas habilidades, tenemos un caos tremendo entre lo que se dice en el papel y lo que se hace realmente”, afirmó.
Además, maestros en ejercicio afirman, “que las clases de Música desaparecen en favor de las de Matemática y Lenguaje, lo que es alucinante porque si es prescriptivo el curriculum y hay una materia que se llama Música, ésta se debe dar, no puede desaparecer”.
La plataforma que han diseñado “consiste en un software que conforma una base on line, que no es un aprendizaje e learning, sino un aprendizaje híbrido: un diseño semipresencial en el que hay 2/3 partes de la carrera con material on line y programas y 1/3 parte presencial”.
Según el investigador, a partir de esta iniciativa “ha sido posible incorporar herramientas software que no existían en otros cursos, y que permiten proponer ejercitación y evaluación en tiempo real. Eso quiere decir que tenemos grandes bloques de actividades productivas complejas, con evaluación formativa incorporada, que antes no estaba disponible. Estas herramientas, que tienen algoritmo, que capturan el impulso del usuario, contemplan un software que constituye nuestro aporte al proyecto”, aseguró.
En el marco del mismo proyecto han impartido diversas charlas en La Serena, en Valparaíso, Magallanes y Punta Arenas (detalle en http://www.educamus.cl/presentaciones/) y realizado docencia en La Serena y en la UMCE sobre Introducción a la Investigación en Educación Musical. Jesús comentó que también integró el proceso de rediseño curricular de Música en La Serena, en el que había un objetivo común con el proyecto que después realizaría en la UMCE: “transversalizar las tecnologías en todas las materias del currículo de la carrera de Pedagogía en Música”.
Finalmente, anunciaron que están trabajando con la Fundación de Orquestas Juveniles de Chile (FOJI) utilizando el diseño metodológico de apoyo a la formación musical a través de una plataforma tecnológica, “para que el niño aprenda sus partes a partir de un enfoque de ver, escuchar, leer y reflexionar, conformando un diseño orgánico que empieza desde lo global hasta lo particular, y en fases progresivas”. A partir de sus resultados buscarán desarrollar junto a Integra un proyecto de perfeccionamiento musical para la educación parvularia, considerando que los primeros años es la mejora etapa para la formación musical, concluyeron.
Investigación PMI
Este trabajo, seleccionado en el Concurso de Investigación e Innovación en Educación, fue postulado por el profesor Thayer. Lleva por nombre “TIC en los contenidos curriculares. Una Investigación - Acción en relación a los estándares educativos para mejorar las competencias digitales y su integración curricular en la formación inicial del profesorado de música” y contempla la participación del académico español como investigador externo asociado.
En opinión del mismo especialista, el enfoque de investigación es otra de las contribuciones relevantes al trabajo realizado: “para sistematizar los procedimientos, los instrumentos y dar una visión más de investigación por los profesores. Un profesor implicado en su profesión hace investigación porque le preocupa que los alumnos aprendan y a veces lo hace de una manera sistemática o si tener más que los datos intuitivos”, afirmó.
El estudio seleccionado, detalló Tejada, pretende “imbricar los contenidos de tecnología en otras materias, mezclando didáctica, lenguaje musical, formación instrumental, formación vocal, para que los estudiantes realicen lo que se denomina ‘objeto digital de aprendizaje, que servirá para impartir las clases de música en educación básica y media. Se les proporciona una metodología de trabajo basada en tres proyectos, que trabajan de manera colaborativa, para ver si los contenidos tecnológicos pueden articularse en toda la malla curricular, de manera que no exista la materia de tecnología, sino tecnología en cada una de las materias, contextualizado a la práctica docente, innovando en el anclaje con los contenidos didácticos”.
Esta primera experiencia, agregó Tomás Thayer, “permitiría también indagar en cuál es el mejor momento de la carrera para impartir estas materias y cómo las asignaturas disciplinares pueden imbricarse con la tecnología y no tenerla como una asignatura vertical, sino transversal. En el futuro debiera desaparecer la asignatura específica y tener una estructura tipo seminario o colegiadas, impartidas por varios profesores”.
