El evento organizado por la carrera de Licenciatura en Educación y Pedagogía en Educación Diferencial Especialidad Problemas de la Visión de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, convocó a padres y docentes en tres jornadas que contaron con la participación de expertos del área nacionales y extranjeros, especializados en Programas Educativos que promueven la inclusión al mundo de la vida comunitaria y el trabajo.
Durante el desarrollo de la actividad, la Directora de Investigación de la UMCE, Ana María Figueroa, destacó que el acceso a la educación es particularmente inequitativo para la población de personas con discapacidad múltiple y sordo-ceguera, enfatizando que si a esto se suma el situar esta problemática en la transición a la vida adulta, esto se transforma en un proceso tremendamente complejo y desafiante.
Las estadísticas en Chile muestran, dijo, que el 71% de las personas con discapacidad única no logran acceder a un trabajo, independiente o protegido: "Esta realidad se acrecienta significativamente en las personas con discapacidad múltiple ya que los programas educativos carecen de la implementación del proceso de transición".
Lo anterior, añadió la académica, afecta sin duda su calidad de vida, puesto que estas personas ven interferido el desarrollo de sus habilidades sociales, su autonomía, su autoimagen; en fin, ven disminuido su desarrollo pleno como seres humanos.
Las experiencias realizadas en otras partes del mundo, agregó Ana María Figueroa, han demostrado que un estudiante con el cual no se desarrolla un plan de transición a la vida adulta, vive con escasas expectativas de realización de un proyecto de vida que permita su desarrollo pleno.
“Chile se enfrenta a este gran desafío dado que son muchos los jóvenes que no tienen posibilidades más allá de quedarse en casa y tener la posibilidad de encontrar una vacante en un taller protegido". Por ello, enfatizó Figueroa, se hace tremendamente necesario proponer e investigar acerca de las estrategias más efectivas y adecuadas para lograr una real participación de estudiantes con discapacidad en sus contextos sociales y comunitarios, de manera de garantizar su inclusión real durante todas las etapas de su vida.
Por otra parte, la Decana (s) de la Facultad de Filosofía y Educación de nuestra casa de estudios, Ana María Soto, se refirió a la labor de su Unidad sobre la actualización de estrategias educativas en pro de la inclusividad: “con un abordaje interdisciplinario nos acercaremos a lograr esta meta”. Asimismo, la académica revisó la trayectoria de la UMCE en la temática de la discapacidad múltiple y sordoceguera, donde se ha situado como un importante referente para el país. Nuestros profesores, dijo, son altamente requeridos y han cursado programas de perfeccionamiento en el área: "toda esa especialización apunta a desarrollar planes para los estudiantes que viven con escasas expectativas de realización de proyectos de vida y a apoyar el proceso de separación de sus familias, permitiendo así su inclusión", aseguró.
Cabe señalar que los vínculos establecidos entre la UMCE y el Programa Hilton Perkins han favorecido la capacitación de profesionales en esta área, así como la creación de un Magíster único en el país, dictado por nuestra Universidad.
