La ceremonia, organizada por la Corporación Moisés Mussa Battal y la Facultad, y contó con la presencia de autoridades del plantel universitario, encabezadas por el rector de la UMCE, Jaime Espinosa, y la decana de la Facultad de Filosofía y Educación, Ana María Figueroa, de la masonería chilena y de la Corporación que lleva el nombre del educador.
El rector Jaime Espinosa aludió a la larga y fructífera carrera de Moisés Mussa y su permanente interés por renovar, perfeccionar, vitalizar la educación chilena, a la que dedicó su inagotable vocación y destacó que fuera el segundo Doctor en Filosofía y Letras del país.
“No sólo fue un teórico de la educación”, agregó en su discurso la decana Figueroa, “sino también un maestro que buscó realizar sus planteamientos. Junto con Darío Salas luchó denodadamente para hacer realidad la Ley de Instrucción Primaria Obligatoria. (…) Moisés Mussa sostenía que el profesor debía ser un hombre culto, en la acepción etimológica de la palabra cultura. Según su concepto, cultura “de cultivar, hacer crecer” es formación con vista a un ideal de perfección, y no un hacinamiento de saber, mera información”.
El presidente de la Corporación Moisés Mussa Battal, Adolfo Navia, también recordó la carrera de Mussa, y su permanente esfuerzo por difundir su decidida convicción de maestría por escuelas, institutos, liceos y universidades.
Al finalizar la ceremonia de homenaje, las autoridades develaron una placa en la sala que congrega las sesiones de los Departamentos Académicos de la Facultad de Filosofía y Educación.
