Departamento de Historia y Geografía - Historia
HISTORIA
La historia de la Carrera de Historia y de Geografía, antes de su actual organización en Departamento, se inicia con la fundación del Instituto Pedagógico. Entre los profesores alemanes llamados a integrarlo se encontraba Hans Steffen, encargado de la cátedra de Historia y Geografía desde 1889. Esta primera cátedra, dedicada a la enseñanza de estas dos disciplinas, constituye el origen primero de lo que es hoy el Departamento.
(Fuente: Pozo, 2015)
Entre las primeras generaciones de alumnos formados por Steffen se encuentra, entre otros, Enrique Molina Garmendia (uno de los impulsores de la descentralización del sistema educativo superior chileno y fundador de la Universidad de Concepción). El mismo Molina señalaba:
“En el Pedagógico aprendí […] a trabajar, a estudiar y comencé a sentir el seguro resorte de una disciplina interior. Arraigó en mí la idea de que Chile necesitaba más profesores que abogados y educar se me presentó como una misión social. Fue la iniciación en la búsqueda de un sentido pleno de vida” (Enrique Molina Garmendia)
Durante las primeras décadas del s. XX, el Instituto Pedagógico se consolidó como el principal centro de formación de profesores del nivel secundario y la formación pedagógica en Historia y Geografía. De sus aulas siguieron egresando destacados profesionales que tendrían un alto impacto en el sistema educativo escolar, en la construcción de políticas públicas y por cierto, en la producción de conocimientos ligados a las humanidades tanto en Chile como en América. Tal es el caso de Ricardo Donoso Novoa (Premio Nacional de Ciencias Humanas); Luis Galdames Galdames (Creador del Reglamento General de Educación Secundaria y Redactor de la Constitución de Chile 1925), Carlos Monge Alfaro (Benemérito de la Patria-Costa Rica, Premio Nacional de Historia-Costa Rica; Redactor de la Constitución de Costa Rica 1949), entre otros.
Ya reacomodada la formación en una estructura de Facultad (Facultad de Humanidades y Educación) la unidad académica encargada de la carrera va consolidando una sólida posición en el ámbito universitario nacional e internacional. Bajo el decanato de don Juan Gómez Millas, el impulso a la investigación se concreta entre otras realizaciones en la creación de diversos institutos, entre los cuales destacan los de Geografía y de Investigaciones Histórico-Culturales. La reforma de 1959-60 fue la conclusión de este proceso asignando al Instituto Pedagógico una función exclusivamente profesional, sin responsabilidad en la formación académica especializada, la cual quedó a cargo de los departamentos centrales de la Facultad, entre ellos los de Geografía e Historia.
La "década de los 60" representa para muchos la etapa de mayores logros en el proceso de consolidación de una actividad académica compleja y rica en expresiones que permitió a la Facultad de Filosofía y Educación alcanzar su máxima expresión en la realización de los principios de este concepto de "ser y hacer Universidad". Bajo el decanato del historiador Julio Heisse, se realiza la definitiva departamentalización que representó en lo académico, el cultivo de la especialidad por la unidad académica correspondiente. Se continúa con la marcada orientación del quehacer universitario hacia la investigación y extensión conjuntamente con la docencia, abandonando definitivamente el sentido exclusivamente profesionalizante de la Universidad. Entre las medidas que logró implementar el decano Heisse y que permitió en gran parte alcanzar este objetivo, fue la introducción de las jornadas completas de dedicación exclusiva para los académicos. La investigación se intensificó y, como consecuencia lógica de ello, mejoró la docencia, se multiplicaron las publicaciones y se diversificó y aumentó cuantitativa y cualitativamente la extensión.
Para los Departamentos de Historia y de Geografía, el proceso de crecimiento y expansión experimentado en las etapas descritas representó un notable desarrollo de ambas especialidades. En sus aulas se formaron y desarrollaron profesores e investigadores de excepción. Los nombres se suceden desde los primeros años y se incrementan de manera ininterrumpida hasta los años 70. En el campo historiográfico se logró introducir las nuevas tendencias imperantes en Europa, que permitieron el inicio de un proceso de actualización tanto en el campo teórico como metodológico, con el surgimiento de nuevas tendencias historiográficas que se expresaron en la realización de investigaciones y publicaciones de monografías de notable calidad en temas de historia económica, social, cultural y de las mentalidades entre otras. La geografía, a su vez, logró un desarrollo significativo tanto en la actualización de las metodologías como en el enfoque teórico. El avance experimentado en el campo de la investigación geográfica permitió a los especialistas de la Facultad participar en obras como la Geografía Económica de Chile de la CORFO y en proyectos de gran importancia y trascendencia como el proceso de Regionalización del país.
Dentro de las transformaciones de la estructura de la antigua Universidad de Chile, en 1972 se crearon, como está dicho más arriba, las Sedes. En la Sede Occidente se creó el Departamento de Estudios Humanísticos, que daba, entre otras, la Licenciatura en Historia. A él emigraron docentes e investigadores de la Facultad de Filosofía y Educación, ahora confinada a la Sede Oriente. Esa Licenciatura se discontinuó, sin embargo, con la eliminación de las Sedes y casi todos esos profesores volvieron a su hogar original. Finalmente, con la radical transformación de 1981 y el nacimiento de la Academia Superior de Ciencias Pedagógicas, surge la Carrera de Historia y Geografía, luego elevada administrativamente a Departamento.
Sólo por nombrar algunas destacadas figuras que egresaron de estas unidades y ejercieron la docencia se encuentran los Premios Nacionales Eugenio Pereira Salas, Guillermo Feliú Cruz, Néstor Meza, Ricardo Krebs, Mario Góngora y Rolando Mellafe.