La Oficina de Transversalidad y la Unidad de Desarrollo a la Docencia hicieron un llamado a reflexionar y dialogar en torno a un tema clave en estos días, en el conversatorio “Convivencia como eje estratégico en Educación Superior”.
La actividad fue guiada por las profesoras María Eugenia Letelier (Oficina de Transversalidad UMCE), Mónica Peña Lillo (Cátedra UNESCO) y Patricia Monzón (Departamento de Formación Pedagógica UMCE). El objetivo fue compartir ideas y pensamientos sobre la convivencia como un eje estratégico para la organización de la comunidad, sus procesos formativos y la construcción de un espacio de ejercicio democrático, participativo y pacífico.
“Hacernos cargo de que la convivencia debe ser un eje estratégico en la universidad. No es una tarea específica, una acción ni una línea de trabajo, sino una ruta que se vislumbra hacia el futuro y a largo plazo”, detalló María Eugenia Letelier.
El conversatorio contó con participación de estudiantes, académicos/as y profesionales, quienes abordaron la doble exigencia que tiene la UMCE, como una universidad que imparte carreras pedagógicas, al deber asumir la convivencia como un eje estratégico y generar procesos formativos que permita a los/as futuros/as docentes responder a las exigencias del ámbito de la convivencia en el sistema escolar.
“Hay poca reflexión sobre la convivencia en los espacios de educación superior. Es necesario que exista un plan de convivencia con sentido estratégico, el que se construye y requiere de tiempo y acumulación de experiencia”, agregó la coordinadora de la Oficina de Transversalidad. “La convivencia influye en todo: dentro del aula, en la relación entre profesor/a y estudiantes, durante el aprendizaje porque la forma en que se enseña y se aprende es parte de la convivencia; también en cómo se organiza la comunidad; en los procesos de conversación para construir comunidad; y en cómo usamos los espacios compartidos. La comunidad educativa es la que tiene que aprender a convivir”, cerró.
