Para la médica veterinaria Lara Valderrama enfrentar de forma virtual el examen de título del Magister en Ciencias con mención en Entomología UMCE tuvo más beneficios que dificultades. De esta forma, se convirtió en la primera estudiante del programa titulada bajo esta modalidad.
La profesional, que se desempeña en el Laboratorio de Referencia de Entomología perteneciente al Subdepartamento de Genética Molecular del Instituto de Salud Pública, desarrolló la tesis titulada “Análisis del patrón de distribución actual de Anopheles (Ano.) pseudopunctipennis Theobald (Diptera: Culicidae) en Chile y su proyección bajo los efectos del cambio climático". “Mi proyecto de título se centró en el modelamiento de nicho actual y proyectado según las condiciones de cambio climático de Anopheles pseudopunctipennis en Chile, mosquito vector de Malaria, cuya distribución se confina a las quebradas de las regiones de Arica y Parinacota y de Tarapacá en Chile”, detalló la ahora Magíster en Ciencias, quien trabaja con insectos y arácnidos vectores de enfermedades de importancia en salud pública.
Su profesor guía, el académico del Instituto de Entomología UMCE Christian González, destacó la proyección e impacto de la investigación desarrollada. “Expuso sobre los potenciales riesgos en la ampliación del rango de distribución geográfica de este mosquito en el norte del país, ya que esta especie es un eficiente vector del patógeno causante de la Malaria. Si bien es cierto esta enfermedad no registra casos autóctonos en Chile desde 1945, la fuerte presión migratoria en el norte de Chile de personas provenientes de regiones en donde esta enfermedad es endémica, constituye un riesgo sanitario importante para el país sumado a la acción del cambio climático bien podrían contribuir a la aparición de casos autóctonos de Malaria en el norte de Chile. Su trabajo podrá ser usado, por los organismos pertinentes, para tomar decisiones informadas al momento de implementar las medidas de vigilancia vectorial”, indicó.
A pesar de las complicaciones propias de compatibilizar estudios de postgrado con las obligaciones laborales, la profesional pudo sortear con éxito el proceso. “Mi trabajo se relaciona directamente con lo que aprendí en el Magíster por lo que pude avanzar proyectos del trabajo y de estudio de forma paralela. Estoy muy contenta de haber realizado este Magíster ya que se me abrió un mundo de conocimiento motivándome a continuar investigando y aprendiendo. Además, fuera de todo el conocimiento entomológico que obtuve, aprendí a desarrollar mi pensamiento crítico lo que es tremendamente útil en toda labor científica”, asegura.
- ¿Y cómo fue vivir este proceso de forma remota?
- La experiencia de vivir este proceso vía remota fue más tranquilizadora para mí, ya que no existió la presión de defender de forma presencial. Además no había público más que los evaluadores, el director de tesis y el ministro de fe, lo que también generó menos presión, aunque también hubiese sido una gran experiencia haber compartido el proceso con más gente, como mis compañeros de Magíster.
Con mi profesor guía fuimos trabajando en conjunto a medida que avanzaba en el proyecto, realizamos reuniones online para presentar avances y resolver dudas y, además, el escrito lo realicé vía Google Drive para facilitar la revisión. Para este proyecto no hubo trabajo de campo per se, debido a que los registros se obtuvieron de colectas anteriores ya sea del mismo laboratorio en el que trabajo o de las oficinas provinciales de las distintas SEREMIs de Salud. El proyecto se basaba más bien en análisis informáticos y biogeográficos, por lo cual tuve que acudir a cursos, solicitar ayuda a expertos y leer mucho para poder poner en práctica estos tipos de análisis, los cuales eran materias nuevas para mí.
